El cine de Luis Javier Henaine ha demostrado ser una montaña rusa, altibajos que se olvidan al salir de la sala de cine, así pasó con su Opera Prima, “Tiempos Felices” y con “Solteras”, ahora con “Desaparecer por Completo” nos entrega el que quizá sea su mejor trabajo en la dirección pero que adolece de lo mismo que sus pasados trabajos, un final deslucido que impide salir con la satisfacción de lo visto.
Santiago es un fotógrafo de nota roja, cada noche deambula por la ciudad en busca de la imagen escandalosa, provocativa. Cuando recibe el aviso de que han hallado a un político muerto en su casa, no duda en acudir a tomar fotos. A partir de ese momento descubre que está perdiendo los sentidos por culpa de una maldición que amenaza con hacerlo desaparecer por completo.
“Desaparecer por Completo” tiene un arranque prometedor, con una estética que recuerda “Seven” y “Nightcrawler” con un personaje fascinante, Luis Javier Henaine toma las riendas de un thriller convencional que resulta muy efectivo, desafortunadamente una vez que la película comienza a dar un giro al cine sobrenatural, parece que la historia y el control de la película se le van de las manos, hasta llegar a un último tercio que no sólo traiciona a su protagonista, sino que pierde la atención del espectador.
La cinta es protagonizada por Harold Torres, quien personifica de forma adecuada a un fotógrafo, comprendiendo no es sólo activar el click sino jugar con la cámara de fotos y hacerla una con él, no es un personaje simpático, es arrogante, es egoísta, los momentos con su pareja son escasos y con reproches, obsesionado con la fama que sus fotos le puedan dar. Una vez que acepta hay una fuerza sobrenatural que está minando su salud, sus actitudes cambian, aunque una vez pasado el ritual de sanación, se desdibuja y sólo llega a realizar su último acto ante cámara por cobardía del guión que no se atreve a ser fiel al personaje. Sin duda lo mejor de la cinta.
El guión de “Desaparecer por Completo” hace agua por todos lados, abre demasiados frentes sin explicarles ni cerrarles, sólo creándoles porque al momento necesitan justificar las cosas, lo que hace el trabajo pase del thriller al horror sin sentido sólo por pasar, que se mencione a juegos políticos de fondo como causa de lo que le sucede, aunque no tenga ningún sentido en realidad. Y quizá su mayor falla sea que al final se acobarde totalmente.
Uno de los aspectos más polémicos de la cinta es el diseño sonoro en el último tercio de la cinta, donde el personaje comienza a perder el sentido del oído, si bien en una sala de cine funciona, en televisores caseros al llegar a estos medios se convertirá en una tortura.
Hay que aplaudir sin duda que el realizador haya decidido meter en la cinta diversas referencias al trabajo de Enrique Metínides, el más grande fotógrafo de nota roja que haya dado este país, se agradece la recreación de algunas de las imágenes icónicas de su carrera.
“Desaparecer por Completo” es una película honesta con su título, al igual que el personaje que va perdiendo los sentidos, al final se desdibuja de tal manera que se desaparece sin rastro, desperdiciando una gran idea en aras de hacer una cinta correcta para los que son políticamente correctos.
La película formó parte de la Sección Oficial del Festival Internacional de Cine de Morelia 2023.
“Desaparecer por Completo”
Director: Luis Javier Henaine
Guión: Ricardo Aguado-Fentanes / Luis Javier Henaine
Con: Harold Torres, Tete Espinoza, Fermín Martínez, Vicky Araico, Norma Reyna y Eligio Meléndez
Fotografía: Glauco Bermudez
Edición: Jorge Macaya
Música: Alejandro Otaola
Compañía Productora: Moonlight Pictures / Panorama Global / Varios Lobos
Fecha de estreno: TBA
País: México 2023
Duración: 100 minutos
