En el 2019 fue estrenada la cinta de de Mariano Cohn, “4x4”, un filme con una línea moral bien definida que lanzaba una mordaz crítica a la inseguridad y la falta de justicia en un barrio de Buenos Aires. En ella, un ladron de poca monta (Peter Lanzani) quedaba atrapado en el vehículo que da nombre a la historia para descubrir que forma parte de una trampa ideada por un personaje (Dady Brieva), poniendo en frente el dilema de que tan válida es la justicia por propia mano cuando nadie te ayuda, especialmente la autoridad que debería hacerlo.
La propuesta resultaba interesante, tensa y claustrofóbica. Carente de especatularidad o acción planteaba un dilema sobr eun problema social visto desde lo particular hasta lo general. Claro que, esa aparente sencillez es tirada por la borda en la excesiva y contradictoria cinta “Encerrados” (Locked), de David Yarovesky (Brightburn, 2019; Nighbtbooks, 2021), amigo y protegido de James Gunn, que al llevar este relato a su versión estadounidense, pierde la brújula entre la buena tensión y el dilema moral original que planteaba la cinta argentina.
El absurdo y, por momento, tonto thriller nos presenta a Eddie Barrish (Bill Skarsgaard), un joven que no encuentra rumbo en su vida y se dedica a robar o estafar para sobrevivir. Padre de una pequeña a la que constantemente olvida e ignora, el poco agradable tipo encuentra una solución a sus problemas económicos al encontrarse un auto a solas modelo Dolus, con vidrios polarizados, poderoso e imponente en su estrucutra. Por ello, Eddie decide intentar robarlo... sin saber que al entrar, no habrá una salida fácil de ello.
Durante una semana, Eddie tendrá que enfrentar los retos que el dueño del automóvil, William (Anthony Hopkins) le va poniendo mientras lo hace escuchar su historia. Ante ello, Eddie busca una escapatoria de esta carcel rodante. Sin embargo, William no dejará que él escape de forma tan sencilla, convirtiéndose en un duelo claustrofóbico con momentos tan ilógicos como risorios en los que esa crítica social sobre la inseguridad y la delgada línea de la moral, inclinándose por una venganza más que justicia expedita pero sin pies ni cabeza.
Yarovesky saca lo mejor que puede de Skarsgaard, joven actor que ha demostrado sus virtudes en la acción (Boy Kills World) previamente. La dificultad aquí es el factor del encierro, algo que limita al cineasta a tratar de crear un aura de suspenso adecuada con solamente él en el foco de la cámara. Aunque por momento logra emular ese sentimiento intimista y de soledad que la cinta original proponía, es el drama humano donde “Encerrados” comienza a ponchar sus llantas en esta intensa rodada de hora y media.
Y es que uno de los principales problemas de este remake es, justamente, que quieren crear en Eddie y William un doblete de personajes que no son ni buenos, ni malos, sino víctimas de un sistema que los orilla a hacer lo que hacen. La poca credibilidad que mantienen ambos y los deleznables actos o actitudes que presentan hacen que los dos sean poco empáticos. Incluso Skarsgaard con su historia familiar y el tema de su hija meramente funciona como un complemento de distracción entretenida para la tortura del espectador mientras el justiciero involuntario se convierte en alguien que, más allá de la justicia, pareciera estar demente.
Esa falta de congruencia en las acciones de los personajes podrá funcionar en el grado del entretenimiento puro, pero que termina por inclinarse más por la espectacularidad de ciertas escenas o peleas que por el verdadero dilema de las culpas. Uno no puede conectar del todo con SKarsgaard porque lo conocemos siendo un reverendo desgraciado que, posteriormente, parece buscar redención propia no por su hija o su familia, sino por él mismo. Es egoísta y patético. Y Hopkins, a pesar del carisma impuesto mayormente en su voz, termina por olvidarse de aquellos justicieros callejeros como “Harry el Sucio” (1971) o “El Vengador Anónimo” (1974), Paul Kersey, para convertirse más en un psicópata torturador con una moral cuestionable.
Otro de los puntos que no funciona del todo es la música de Tim Williams, misma que de repente no encaja ni con la atmósfera ni con el ritmo de lo propuesto en cámara por Yarovesky, haciendo que el thriller se diluya hacia, por momentos, una comedia involuntaria. Ni qué decir de una edición que en la búsqueda de crear un ritmo frenético, se siente entrecortada y con lapsos repetitivos que no ayudan a que la hora y media de cinta fluya del todo.
Claro que Yarovesky tiene ciertas ventajas al tener a estos dos actores al frente del relato. A pesar de los absurdos y sinsentidos en el guion, escrito por Michael Ross (Turistas, Wrong Turn), Bill Skarsgaard sabe e intenta por todos lados sacarle el máximo provecho al inútil ladrón atrapado en este automovil de lujo, que termina por convertirse en un involuntario protagonista del relato. Por algunos instantes, donde las reflexiones por parte de este criminal llegan en el auto, la cinta recuerda a la minimalista “Locke” (2013), con Tom Hardy teniendo una pésima noche conduciendo por una autopista.
A pesar de esos guiños decente y de que la cinta no carece de ciertos puntos entretenidos, "Encerrados" pierde el foco del thriller al convertirse en un ejercicio que sobrepone la acción sobre la historia, siendo un tanto cobarde en el desenlace del conflicto y optar por el final feliz, algo que la original "4x4" no ofrece. Aquí, ni la analogía de la prisión y mucho menos la línea y discurso moral de la justicia tienen peso, pues Yarovesky y compañía solamente ofrecen un viaje de hora y media que podrá resultar efectivo en momentos.
Con todo el esfuerzo que el filme pone, no supera a aquellos encierros donde si existía un duro aleccionamiento, como sí sucede con clásicos de culto tipo “Enlace Mortal” (2002). Encerrados es meramente un juego más del gato y el ratón irregular donde no hay mayor sorpresa ni cruda reflexión, solo decisiones malas en un microverso que crea por momentos atmósferas interesantes hasta que los balazos y la acción rompen con la que podría haber sido un conflicto interesante e intenso sobre una complicada brújula moral.
“Encerrados” (Locked)
Dirección: David Yarovesky
Guión: Michael Arlen Ross
Con: Anthony Hopkins, Bill Skarsgård, Navid Charkhi
Distribuidor: Diamond Films
Fecha de estreno: 21 marzo 2025 (Estados Unidos) 08 mayo 2025 (México)
País: Estados Unidos, 2025
Duración: 100 minutos