Paul Schrader es una de las grandes mentes del nuevo Hollywood , su trabajo como guionista para Martin Scorsese, Peter Weir y Brian de Palma, entre otros, le han ganado ya un lugar en el Olimpo de las grandes, por lo que su trabajo como director muchas veces se ve opacado ante esas menciones, olvidándose trabajos como “American Gigolo” (1980), “Mishima: A Life in Four Chapters” (1985) o la casi reciente “First Reformed” (2017), donde ha mostrado no sólo una gran sensibilidad en su puesta en escena, sino una mano increíble para sacar provecho a sus actores, por lo que no resulta sorpresivo que “El Contador de Cartas” (The Card Counter) sea una cinta que apunta a cuestiones sociales, personales y más allá aún.
William Tillich ha salido de la cárcel tras una estancia de muchos años, durante los cuáles aprendió todos los trucos del mundo de las cartas, dedicándose a su salida a jugar en casinos sin levantar grandes números para no atraer la atención sobre él. Cuando conoce a Cirk, con C, hijo de un antiguo compañero suyo del ejército, lo toma bajo su cuidado, involucrándose en el negocio de los concursos de póker para ganar más dinero.
La cinta es protagonizada por Oscar Isaac quien poco a poco se va consolidando como uno de los actores más extraordinarios de su generación, uno que logra transmitir una amplia gama de emociones sin realizar grandes aspavientos, sin sentir que se está esforzando por llevar a sus personajes a dónde deben llegar. En esta ocasión su retrato de un exmilitar en busca de su redención, reencontrando el amor, la familia, una razón de ser, es brutal, es dolorosa, sobre todo por la imposibilidad de cambiar en realidad el destino que parece tener escrito. A su lado, Tye Sheridan sigue avanzando con papeles complejos y llenos de humanidad. Los otros dos intérpretes son Tiffany Haddish, quien como la mujer que busca explotar el talento de William logra atrapar la atención y, sobre todo en la secuencia del encuentro en el cuarto con Isaac, demostrar con una sonrisa todo lo que su personaje tiene, completando el cuadro Willem Dafoe, como un cínico contratista militar.
Paul Schrader realiza una cinta que nos remite de inmediato al cine que se hacía en la década de 1970, con una atmósfera agobiante, con un estilo visual que muestra el oropel de los casinos sin perder de vista lo degradante y poco humano es el mundo dentro de ellos, una película donde lo que importa es el factor humano, que nos remite a sus personajes de siempre, sea Travis Bickle o Julian Kay o Jesús, personajes que están en busca de la redención sólo para encontrar que la única forma de obtenerla es renunciando a integrarse en sociedad. En esta ocasión, la cámara parece deambular flotando por las locaciones, oprimiendo con ello al espectador.
Uno de los elementos más interesantes de “El Contador de Cartas” es su diseño sonoro, el cual logra crear una atmósfera inmersiva que lleva al espectador al centro de los juegos, a vivir la experiencia auditiva de los casinos, la cual contrasta con el vacío de las habitaciones de hotel, y que alcanza su mayor grado en los flashbacks de las cárceles ilegales militares.
“El Contador de Cartas” no sólo nos lleva al interior de un hombre roto, nos lleva a una sociedad rota, una donde la legalidad no importa siempre que se obtengan los resultados deseados, una donde la soledad es una cárcel más imponente que aquella con barrotes, donde la redención es una pesada cruz que te aplasta a la vez te libera.
Los invitamos a ver el tráiler.
“El Contador de Cartas” (The Card Counter)
Director: Paul Schrader
Guión: Paul Schrader
Con: Oscar Isaac, Tiffany Haddish, Tye Sheridan, Willem Dafoe
Distribuidor: Cine Caníbal
Fecha de estreno: 10 septiembre 2021 (Estados Unidos) 24 febrero 2022 (México)
País: Estados Unidos 2021
Duración: 112 minutos
