Críticas

Amor imposible te enseña a pescar en Yemen

Amor Imposible será uno de los títulos de películas en español más desafortunados al enmarcar el film simplemente como comedia romántica cuando tiene mucho más que eso. Amor Imposible es en realidad dos películas, en una primera parte tenemos un guión fresco, divertido y crítico de la realidad política y creencias personales (no necesariamente religiosas), y en su segunda parte, tenemos a una película llena de clichés románticos y un desenlace que decepciona.

Atrapen al gringo, entretenido cine de cliches

Un soldado norteamericano venido a menos roba 2 millones de dólares a un mafioso de ese país, escapa y termina arrestado en México, donde no sólo pierde el dinero sino es encerrado en una de las peores cárceles del país. En ella entabla relación con un niño de diez años y su madre, quienes le recuerdan siempre hay una buena causa para luchar.

Protagonizada por Mel Gibson la película es un recordatorio de que lo mejor que puede hacer el actor es ese cine de acción, sin tramas complicadas y donde la adrenalina esta todo el tiempo a tope, como actor no hay que pedirle dramas sublimes a lo Hamlet, para él la intuición es lo que mejor se le da.

Blancanieves y El Cazador, una historia sin corazón

Blancanieves y El Cazador entra en la lista de las peores películas del año y no sólo por la pésima actuación de Kristen Stewart, quien parece un robot en pantalla, sino por la falta de corazón y estructura en la trama. Blancanieves como muchas otras historias populares tiene un propósito, de manera similar con Caperucita en donde se advierte los peligros que enfrentan las jóvenes que ya menstruan, Blancanieves muestra el cómo se deben comportar las mujeres, con un final que varía dependiendo de la historia que se lea, como puede ser la muerte de la madrastra al ser condenada a bailar con zapatos de hierro.

Blancanieves y El Cazador se queda a medias al no comprometerse con un ideal, a diferencia de otras adaptaciones como, es fácil decir la más famosa, la de Disney. Adaptación en la que Blancanieves es la joven hermosa, inocente y completamente pasiva quien es rescatada por el Príncipe y ella como buena mujer es el accesorio perfecto a quien hace la acción, mientras que la madrastra quien busca el poder y trata de cambiar el orden de las cosas termina derrocada y en desgracia.

Albert Nobbs, las apariencias engañan hasta a uno mismo

Albert Nobbs es un mesero honesto, trabajador y muy cuidadoso al atender a la clientela, razón por la cual recibe continuamente propinas pero Nobbs no es el típico hombre que despilfarra el dinero cada fin de semana para terminar borracho en algún callejón. Albert Nobbs meticulosamente anota, cuantifica y guarda cada moneda que llega a sus manos en busca de cumplir su mayor deseo. Sin embargo, su vida se ve trastornada al conocer a una persona inusual, justo como él, y que despierta sentimientos que había mantenido ocultos y olvidados muy dentro de su propio ser.

Con un guión en el que el protagonista, en este caso Glenn Close como Albert Nobbs, no es el que lleva las acciones sino aquel que pasa como un sombra alrededor de aquellos activos, intenta dejar la pasividad e inevitablemente se ve condenado a quedarse siempre entre las sombras como un fantasma, un ser que se ha escondido de todos y de sí mismo por tanto tiempo que para el momento que decide cambiar, ya es muy tarde. Así la película cuestiona el cómo vivimos y el cómo queremos vivir.