La lucha por la verdad a través de la ventana del periodismo es un reto en cualquier parte del mundo. Tratar de exponer lo que los poderes fácticos quieren mantener oculto siempre conlleva un riesgo, el cual no muchos periodistas están dispuestos a correr. Y menos cuando lo que les mueve es el querer dar a conocer la verdad y no el mantener su estatus social y económico a cualquier precio. Una de esas historias es la que narra Maten al Mensajero (Kill the Messenger), basada en un hecho real y cuyo título está inspirado en el hecho de que en la Roma y Grecia de la antigüedad se mataba al portador de las malas noticias, como culpándole del hecho en lugar de acabar con los principales responsables.
Cuando un periodista de San Jose Mercury News, un modesto diario de California, descubre por azar la forma en que la CIA mantuvo la lucha de la contra nicaragüense en los 80s se ve envuelto en una serie de acontecimientos que ponen en riesgo no sólo su trabajo sino su vida.