Sally Potter nació en el Reino Unido en 1949, empezó a filmar desde sus catorce años con una cámara de 8mm. La cineasta británica contó que sus inicios como cineasta son como los de cualquier otro, uno crece amando las películas que ve, para Sally Potter las películas de los hermanos Marx eran de sus favoritas.
Continuó platicando sobre la primera vez que tomó una cámara y miró por el lente, “empecé a sentir lo que era un encuadre y quedé encantada por lo que era posible hacer.” Añadió que todo comenzó haciendo pequeñas películas.
En sus inicios, Sally Potter fue parte de la Cooperativa de realizadores cinematográficos que contaban con un espacio y equipo muy rudimentario que servía para filmar y editar. Sin ir a ninguna escuela de cine, Sally Potter contó que fue en ese lugar que se volvió una realizadora. Sin embargo, no duró mucho tiempo ya que la agenda social y política de la cooperativa no era algo que a ella le interesaba.
Dentro de los cortometrajes presentados en el Festival Internacional de Cine de Morelia en su 10 edición se encuentra La herida de Lucrecia escrito por Daniel Rojas Plata y dirigido por Sabrina Maldonado, donde la historia se centra en la vida de Lucrecia, quien ha superado el cáncer de mama, pero no la soledad que padece desde hace tiempo, y quien con la llegada de un extraño a su vida, le hará comprender que hay heridas que no pueden sanar solas.
Para Sabrina Maldonado este cortometraje va más allá del tema de cáncer de mama, sino de la soledad que vive Lucrecia: “Creo que el corto no habla en sí de la enfermedad porque esto pasa después de que ella lo ha superado, si no de la carencia que ha tenido la protagonista en su vida. Me gusta pensar en el corto como una fotografía de la soledad y no tanto como una historia ligada a una enfermedad en particular”.