El mundo del crimen organizado es un llamativo escenario para todos aquellos que encuentran en él no sólo la posibilidad de dinero fácil, sino de una camaradería que no encuentra en otros ámbitos, una sensación de poder y de pertenencia que le hace adictivo, donde una vez que se ingresa, el dejarle es casi imposible. En “Placeada” seguimos la historia de Gaby, quien entra en ese mundo casi por juego, convirtiéndose en una sicaria dentro del mismo, mostrando la redención ha hallado y la forma su mundo ha cambiado.
Dirigido por Alejandra Sánchez, quien nos ha entregado ya trabajos llenos de drama y polémica, en este ocasión se aleja del material de archivo para mostrarnos un trabajo centrado en las entrevistas y en donde los exteriores e interiores de los lugares se tornan parte esencial de lo que estamos presenciando. Una película donde la realizadora no juzga a su protagonista, dejándole ser a ella quien cree la imagen con la que las audiencias la recordaran.