En 2014 se estrenó la cinta Ouija (White) cinta de horror que basana su miedo en las leyendas urbanas que se inscriben alrededor del popular tablero de Hasbro y que no era más que un intento atroz y desesperado de llevar gente al cine a ver más de lo mismo. El resultado fue una de las peores películas de terror, una aberración que merecía ser condenada al olvido pero, el éxito en taquilla, le hizo tener una cinta más, una precuela, Ouija, El Origen del Mal (Ouija: Origin of Evil), la cual, sorpresivamente, logra ser todo lo que la anterior hubiese querido ser.
1967, Los Angeles, una viuda se hace pasar por médium para conseguir dinero y pagar sus deudas. Cuando compra una tabla ouija pronto se desatan espíritus oscuros en su hogar, posesionándose de la menor de sus hijas. Para lograr salvarla ella y su otra hija deberán hacer grandes sacrificios.