Críticas
“Turno Nocturno” destruyendo el legado de La Planchada
El cine de terror mexicano puede convertir cualquier tema que toca en una comedia desaforada cuando cae en las manos equivocadas, tal y como lo deja claro la nueva cinta de Rigoberto Castañeda, “Turno Nocturno”, la cual se inspira en la leyenda de “La Planchada”, enfermera que recorre los pasillos de los hospitales para curar pacientes y castigar a los médicos y enfermeras que descuidan sus obligaciones, y que en esta cinta, más que terror provoca incredulidad y hastío.
Rebeca entra a trabajar como enfermera a un hospital del IMSS, su llegada parece despertar la molestia de un viejo espíritu vengativo que recorre los pasillos del hospital, uno dispuesto a castigar a quien no siga sus reglas. Conforme pasan las semanas la situación comienza a salirse de control hasta llegar a un baño de sangre.
“Anora” un perverso cuento de hadas
Sean Baker es uno de los directores estadounidenses más interesantes de los últimos años, desde la osadía de filmar su quinto largometraje con un iPhone (Tangerine) pasando por el drama familiar de “The Florida Project”, el seguir a un cínico al que deberíamos odiar, pero terminamos amando en “Red Rocket”, nos ha logrado atrapar con una narrativa honesta, incómodamente divertida y entrañable, por lo que no sorprende que su más reciente trabajo, “Anora” siga ese camino, aunque con una madurez creativa y emocional que le permite crear su mejor trabajo.
Anora trabaja en un club nocturno, donde a la par de bailes privados ejerce la prostitución de forma ocasional. Una noche conoce a "Vanya" Zakharov, hijo de un oligarca ruso, que queda prendado de ella, iniciando una relación que culmina en su boda, pero su felicidad y cuento de hadas se complica cuando la familia de él se entera y deciden tomar el asunto bajo sus manos.
“Canina”, la violenta experiencia de la maternidad
La premisa, por sí misma, de “Canina” (Nightbitch), el cuarto largometraje de la directora Marielle Heller es, por decirlo de alguna manera, bastante extraña, divertida e incluso absurda, pero para hablar de lo que implica la maternidad, resulta la elección más atinada al momento de exponer con toda honestidad los cambios que ocurren en la mujer que da vida a un nuevo ser.
Es cierto que muchos de los temas que configuran el guion de esta cinta protagoniza por una Amy Adams comprometida con su personaje, no son nada nuevos desde que comenzó la discusión sobre la desmitificación de la maternidad, lo que es cierto es que pocas veces lo hemos visto desde una propuesta sin ornamentos, reprochando libremente la pérdida de identidad de la mujer convertida en madre, sus frustraciones profesionales y los sinsabores de una etapa que así como es hermosa, también tiene su parte violenta, porque sí, puede que “Nightbitch” no sea del todo redonda, pero lo que la eleva por encima de otros largometrajes temáticamente similares es ese arriesgado y controvertido aspecto en el que incide: la maternidad es violenta (o como dice el slogan, “motherhood is a bitch”).
“Queer” el trabajo más fino de Daniel Craig
Llevar a la pantalla grande las obras de William S. Burroughs es un proceso complejo, sobre todo porque el poder de sus relatos recae en lo directo de sus escritos, en el mundo tan irreal que parece retratar, a pesar de que destaca los aspectos sórdidos de la realidad. En esta ocasión toca el turno a “Queer” (Marica), título que si en 1985 sonaba agresivo a muchos, ahora puede resultar más ofensivo para los amantes de lo políticamente correcto.
Lee es un escritor refugiado en la ciudad de México, donde conoce a Eugene Allerton, un marino fuera de servicio, con el que primero entabla una amistad y luego una intensa relación que les lleva a recorrer Sudamérica mientras su relación se va deteriorando.
“Gladiador II” más grande, más sangrienta, más aburrida
Podemos afirmarlo sin temor a equivocarnos que Ridley Scott es uno de los directores que mejor saben sacar provecho a la imagenería bélica, su gran capacidad de crear situaciones épicas de batalla en pantalla es impresionante, así como su capacidad de transmitir la lucha de los individuos contra su destino, afectando emocionalmente al espectador, le hacen un visionario. Desafortunadamente, no todo sale como espera, tal y como lo demostró el fracaso monumental de “Napoleón” (2023) y, ahora, la tardía secuela de “Gladiador” (2000), la cual a pesar de estar lejos de la original, no es un desastre total, aunque casi lo es.
Han pasado dos décadas de la muerte de Maximus Decimus Meridius, su hijo vive en África pero a ambición de Roma lleva a sus tropas a conquistar esas tierras, matar a su esposa y apresarlo a él, quien se ve forzado a convertirse en un gladiador para sobrevivir, pero esto lo lleva a reencontrar su pasado y luchar por la Roma su abuelo soñaba.